martes, 18 de octubre de 2011

...

Ahora toca seguir otro camino. Recuardo los buenos momentos, las miradas, las sonrisas, las risas, los guiños inesperados, los mimos y caricias, los secretos, los abrazos de oso, las palabras de cariño; y por qué no, los besos húmedos y los "te quiero". No son cosas que se puedan olvidar, recuerdo cada hora, cada minuto y cada segundo contigo o pensando en ti, cada paseo recorrido de tu mano y ese "regalo" que sigue encima de mi mesa sin que le encuentre ninguna utilidad. Lo admito, dolió, y mucho. Ya no valía nada, no existía, todo eso se había esfumado para ti. Para mi fue diferente, por un momento me sentí perdida y claramente triste, intenté no venirme abajo, con mis amigos lo conseguí. No costó tanto como esperaba , fue realmente fácil a pesar de todo, a pesar de ella. Cada uno juega a su juego, a su manera...Vale, estoy sola, pero voy ganando. He ganado una batalla al corazón.